Hoy diez años después de aquel fatídico
día puedo decir que soy afortunada por tener diez años más, cuando cientos de
vidas terminaron en esos trenes. Lo que
pasó no tiene otro calificativo que horrible, terrorismo en estado puro. La peor
parte del humano a la luz del día.
Por aquel entonces, yo tenía diez
años y por más que lo intento no puedo recordar cómo me enteré de la noticia ni
cómo reaccioné. Tan solo recuerdo que mi clase de baile de aquel jueves fue
suspendida porque mi profesora iba a viajar desde Asturias a Madrid para ser
voluntaria con las víctimas, los familiares y los heridos. Cada vez que lo
pienso se me pone la carne de gallina. ¿Cómo alguien es capaz de hacer algo tan
cruel y vil? ¿Cómo alguien es capaz de acabar con tantas vidas de golpe y
porrazo destrozando además las de muchos otros? Porque en el accidente no sólo
se pararon las vidas de las ciento noventa y dos personas que fallecieron,
también las de sus familiares y amigos. Vidas que se perdieron para siempre o
que se llenaron de miedo, vidas que cambiaron para siempre aquel maldito once
de marzo de dos mil cuatro.
Lo mucho que te puede cambiar la
vida en minutos o tan solo segundos. Aquel día, alguien cercano a mí decidió
que le llevasen en coche y no coger el tren; ese mismo tren que minutos más tarde
volaba por los aires. Minutos de diferencia que hicieron que la vida le diera
una segunda oportunidad. Es terrible que tengamos que darnos cuenta de todo lo
que poseemos cuando la vida nos da un golpe tan duro.
Hoy, diez años después las
victimas siguen presentes en cada persona, y no únicamente en las que aquel
11-M perdieron a alguien en las vías de un tren, y estoy segura de que podrán
seguir pasando los meses y los años que nadie logrará olvidar este atentado. Lo
peor de todo, es que aunque la justicia haga pagar a todos los culpables, hay
mil ochocientas cincuenta y ocho vidas que cambiaron para siempre y hay ciento
noventa y dos vidas que se perdieron en un tren y que nadie podrá recuperar.
Desde aquí, todo mi apoyo a los familiares y víctimas de cualquier acto
terrorista pero en especial, aquellos víctimas de este 11-M.
No hay comentarios:
Publicar un comentario